El registro a Mar-a-Lago buscaba recuperar documentos de seguridad nacional que el expresidente de EU no entregó, según reporta The Washington Post
En el registro a la residencia de Mar-a-Lago, del expresidente Donald Trump, los agentes del FBI buscaban documentos clasificados relacionados con las armas nucleares, reporta este jueves The Washington Post.
El medio, que cita a fuentes familiarizadas con la investigacion, dice que no se ofrecieron detalles adicionales sobre qué tipo de información buscaban los agentes, incluso si se trataba de armas pertenecientes a Estados Unidos o de otra nación.
De acuerdo con el medio, los expertos en información clasificada dijeron que la búsqueda subraya la profunda preocupación entre los funcionarios del gobierno sobre el tipo de información que pensaban que podría estar ubicada en Mar-a-Lago y potencialmente en peligro de caer en las manos equivocadas.
Las fuentes, menciona el Post, tampoco dijeron si dichos documentos fueron recuperados como parte de la búsqueda. Un portavoz de Trump no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. El Departamento de Justicia y el FBI se negaron a comentar.
Material delicado y restringido
El material sobre armas nucleares es especialmente delicado y generalmente está restringido a un pequeño número de funcionarios gubernamentales, dijeron los expertos.
Publicar detalles sobre las armas de EU podría proporcionar una hoja de ruta de inteligencia para los adversarios que buscan construir formas de contrarrestar esos sistemas. Y otros países podrían ver la exposición de sus secretos nucleares como una amenaza, dijeron los especialistas.
Un exfuncionario del Departamento de Justicia, que en el pasado supervisó investigaciones de filtraciones de información clasificada, dijo que el tipo de información de alto secreto descrita por las personas familiarizadas con la investigación probablemente haría que las autoridades trataran de actuar lo más rápido posible para recuperar documentos confidenciales, que podría causar un daño grave a la seguridad de EU.
Exaltos funcionarios de inteligencia dijeron en entrevistas que durante la administración Trump, la inteligencia altamente clasificada sobre temas delicados, incluida la recopilación de inteligencia sobre Irán, se manejaba mal de manera rutinaria.
Un exfuncionario dijo que la información más clasificada a menudo terminaba en manos de personal que no parecía tener la necesidad de poseerla o no estaba autorizado para leerla, de acuerdo con el Post.
Ese exfuncionario también dijo que la inteligencia de señales (comunicaciones electrónicas interceptadas como correos electrónicos y llamadas telefónicas de líderes extranjeros) se encontraba entre el tipo de información que a menudo terminaba con personal no autorizado.
Tales intercepciones se encuentran entre los secretos mejor guardados debido a lo que pueden revelar acerca de cómo Estados Unidos ha penetrado en gobiernos extranjeros.
Mientras, el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, autorizó personalmente la decisión de solicitar la orden de registro del pasado lunes a la residencia del expresidente Donald Trump en Florida y ha pedido este jueves autorización a un tribunal del sur de este estado para que haga pública dicha orden.
En una breve declaración tras la cual no aceptó preguntas, Garland defendió la legalidad del registro y señaló que este tipo de decisiones no se toman «a la ligera».
Siempre que es posible, aclaró, se opta por medios «menos intrusivos» como alternativa.
La orden de registro fue autorizada por un tribunal federal y el inventario de propiedad es un documento que la ley federal exige que las fuerzas del orden dejen al dueño del lugar.