Urge la aplicación de un verdadero Plan de Emergencia ante la Crisis Económica que contempla congelación de intereses moratorios a deudores: Teresa Carvajal.
Irineo Pérez Melo.- Más de 16 mil 200 familias veracruzanas se han declarado en moratoria en el primer semestre del presente año por la crisis que se padece y que puede llevar a una emergencia económica y social, advirtió Teresa Carvajal Vázquez, representante de El Barzón de Resistencia Civil en el estado de Veracruz, A, C.
En conferencia de prensa, detalló que está información es la que maneja el Poder Judicial del Estado y comprenden juicios hipotecario, bancarios, con financieras, con fondos de vivienda y con particulares y que las familias ya no pueden pagar.
La barzonista consideró que está situación puede agravarse aún más en el segundo semestre, sobre todo por el incremento de los precios que han alcanzado los productos de la canasta básica, derivada de la inflación histórica que se tiene, pero además, por la falta de sensibilidad y de resistencia a convenios de pago por parte de las instituciones de crédito, quienes no acceden a ofrecer apoyos de pago a las personas en situación de deuda.
Sostuvo que por la crisis económica, el salario de las familias es insuficiente y están decidiendo si comer o pagar e indicó que el gobierno ha sido insensible y omiso respecto al establecimiento de un plan de rescate o de emergencia económica que vaya en ayuda o en socorro de todas estas personas en situación de deuda.
La representante legal de El Barzón de Resistencia Civil en el Estado de Veracruz, A. C., denunció que el Banco Santander, es la institución bancaria que más juicios ha promovido, acompañado de drásticas medidas judiciales, como el congelamiento de cuentas bancarias de sus clientes, poniéndolos de rodillas, obligándolos a negociar bajo condiciones desventajosas para ellos.
Sostuvo que otro síntoma inequívoco de que no hay solvencia es el incremento en los créditos e indicó que de acuerdo con las cifras del Banco de México los créditos van en incremento: el crédito al consumo subió 5.6 por ciento este año; las tarjetas de crédito 6.4 por ciento; los créditos de nómina 6.6 y los préstamos personales 7.2 por ciento, lo que representa al menos 29 millones de nuevas tarjetas de crédito en circulación; las familias están gastando lo que todavía no ganan para cubrir sus necesidades básicas.
Señaló que provoca alerta la postura optimista y falsa de las autoridades federales que aseguran que México está saliendo de la crisis, cuando la realidad está al alcance de todos y es preocupante. Hoy las familias mexicanas tienen que decidir entre comer o pagar sus Créditos. Ante ese panorama pidió por último, la aplicación de un verdadero Plan de Emergencia ante la Crisis Económica que contemple que se congelen los intereses moratorios y se ofrezcan alternativas de pago viables de acuerdo al alza en precios que vivimos en el país.
Además, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, la Secretaría de Economía, las comisiones de Hacienda y Economía y Comercio de la Cámara de Diputados deben vigilar que los bancos e instituciones de crédito cuenten con opciones de pago justas y congruentes con la crisis que atravesamos, concluyó.