El campo nacional en completo abandono por el gobierno morenista: campesinos

Programas sociales otorgados no fomentan la producción de alimentos, son dádivas con sentido corporativista enfocados al tema electoral.

Irineo Pérez Melo.- El gobierno de la cuarta transformación mantiene en el abandono al agro nacional y estatal, y los recursos otorgados a través de los programas sociales “son dádivas sociales están más enfocados a la cuestión electoral que para fomentar la producción agropecuaria.
Lo anterior fue señalado por Luis Gómez Garay y Rafael Lindo Chaga, dirigentes de la Unión General Obrero Campesina Popular (UGOCP) y del Frente de Organizaciones Sociales y Económicas del Campo (FOSEC), quienes coincidieron que los gobiernos federal y estatal no les interesa fortalecer al sector rural para dejar de depender de las importaciones de alimentos.
Al referirse sobre el 108 aniversario de la Promulgación de la Ley Agraria en el puerto de Veracruz por el entonces presidente de la República, Venustiano Carranza, los dirigentes agrarios señalaron que aún prevalece la deuda con el campo y que hay mucho por atender para darle certeza a los campesinos, tanto en materia de la tenencia de sus tierras como para fortalecer los sistemas productivos.
Entrevistados por separado, los dirigentes campesinos consideraron que hay un retroceso en materia agraria fomentado por la actual administración morenista, por un lado, con el desmantelamiento de las instituciones relacionadas con el campo y por otro, con la falta de presupuesto para impulsar el desarrollo agropecuario, para el equipamiento e infraestructura, así como para el desarrollo de más sistemas de riego.

Desaparición de Financiera Nacional Agropecuaria, falta de
interés de convertir al campo en palanca de desarrollo: FOSEC
Un ejemplo palpable, dijo Lindo Chaga, es la desaparición de la Financiera Nacional Agropecuaria (FNA), que era la última institución que estaba quedando como un organismo de capitalización del campo, lo que da una idea de la falta de interés de este gobierno de que el campo se convierta en palanca de desarrollo.
Con esta decisión, terció Gómez Garay, aquellos productores que buscan créditos para financiar sus proyectos productivos tendrán que recurrir a otras estrategias para poder contar con recursos frescos para atender sus necesidades de modernización de sus procesos productivos.
La estrategia de apostarle a los programas asistenciales como el de Sembrando Vida, que no sirve para generar riqueza, ni para desarrollar a los pueblos, sino su intención es meramente electoral, aseguró el presidente de FOSEC.

Instituciones agrarias desmanteladas y menospreciadas: UGOCP
Por otro lado, el dirigente nacional de la UGOCEP, lamentó la forma en cómo se ha atendido el tema agrario, al ser mediatizado a lo largo de la historia, si bien generó el reparto agrario de poco más del país, la verdad es que por periodos el gobierno no ha cumplido con las expectativas y se ha venido mediatizando.
“Esto ha sido peor con el gobierno de la 4T, que de manera puntual desapareció la Comisión Permanente de la Reforma Agraria en la Cámara de diputados y ha venido desbaratando las instituciones agrarias que atendían los diferentes asuntos de esa parte de México que representa el México rural”, añadió.
Insistió que actualmente las instituciones agrarias están en una profunda fragilidad, muy debilitadas, menospreciadas en cuanto a su presupuesto y temas de conciliación agraria no existen, la subsecretaría de ordenamiento Rural prácticamente está desaparecido porque no tiene presupuesto alguno asignado y por ello es incapaz de atender un solo caso de conflicto agrario.
Y no se diga, en materia de financiamiento ha sido golpe tras golpe, la 4T desapareció todos los programas de fomento rural, disfrazándolos por pequeñas ayudas que según ellos, atienden el tema productivos, lo cual estos apoyo son meramente dádivas sociales con un sentido corporativista enfocado al tema electoral, no inciden para nada en el tema productivo, subrayó.
Finalmente, los dirigentes agrarios convocaron a las demás organizaciones agrarias a la unidad y a la lucha social para hacer resurgir el movimiento campesino, pero sobre todo para elevar la producción de alimentos, pese al desinterés del gobierno morenista por reforzar los programas productivos del agro nacional y estatal.