AMLO se entromete en política interior de Perú: expertos

Expertos consideran que negativa de entregar el liderazgo de la Alianza del Pacífico obedece a un capricho ideológico y es un error en el manejo de la relación con ese país

EL UNIVERSAL

La negativa del presidente Andrés Manuel López Obrador de entregar la Presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico a Perú es una salida doctrinaria y una intromisión en la política interior de un país, señalaron analistas consultados por EL UNIVERSAL.

“No había visto que en la Alianza del Pacífico se contemplara la reelección; dos, México no se pronuncia tradicionalmente sobre la naturaleza de los regímenes y la tercera, el Presidente plantea consultar al Grupo de Río, que hasta donde llega mi información desapareció en 2009 para crear Celac”, explicó en entrevista Leonardo Curzio.

 

Indicó que el mando se transmitió automáticamente porque no es una posición electa ni que el Presidente pueda ampliar.

Leonardo Curzio recordó que la Alianza del Pacífico no es un mecanismo político, sino uno de integración, por lo que no debería afectar quién esté al frente del gobierno de un país.

La Alianza del Pacífico es un mecanismo conformado por Chile, Colombia, México y Perú, cuyo objetivo es la integración económica y comercial, basada en cuatro pilares: libre movilidad de bienes, servicios, capitales y personas y un eje transversal de cooperación.

 

“Tengo la impresión de que va en un tobogán declarativo el Presidente, que yo no sé si le da puntos en las encuestas pero que claramente sale de la conducción de la política exterior de Estado a Estado”, apuntó el experto.

Expresó que preocupa que confunda de manera “extraordinariamente grosera” los mecanismos existentes porque la Alianza del Pacífico se regula por sí sola, mientras el Grupo de Río ya no existe. “Estoy muy preocupado por las crecientes salidas de tono del Presidente en materia de política exterior”, apuntó.

Aribel Contreras, maestra en Estudios Diplomáticos por el Instituto Matías Romero, señaló que México debería tener una postura mesurada ante la situación política de Perú, a fin de no afectar el funcionamiento de la Alianza del Pacífico.

 

“Está frenando el mecanismo a través de esta intromisión con un tema doméstico de Perú. Parece que no le ha sido suficiente que haya nombrado persona non grata al embajador Pablo Monroy”, recordó.

Está afectando el mecanismo de la Alianza del Pacífico ya que la Presidencia se va rotando anualmente con el fin de organizar la siguiente cumbre, dijo.

Si bien señaló que ha habido aciertos en la política exterior, como la gestión de vacunas contra Covid-19, consideró que México pierde cuando se trata de ideología política.

“Cada vez que se trata de Cuba, Nicaragua y otros países de izquierda, es donde pareciera que ya no prevalece lo que dice nuestra Constitución, sino el pensamiento del inquilino de Palacio Nacional”, expuso.

 

“No podemos permitir que haya esta intromisión de ideología política personal con respecto a lo que la propia Constitución establece”, añadió.

A su vez, Guadalupe Peña, especialista en relaciones internacionales, indicó que el posicionamiento del Mandatario va sobre la línea que ha manejado desde que se dio el cambio de gobierno en Perú.

“Lo que el Presidente no ha dimensionado es que cuando habla de respetar los principios de política exterior, sobre todo la no intervención en asuntos internos, al hacer este tipo de declaraciones no está respetando dichos principios”, expuso.

Consideró que el Presidente no ha estado de acuerdo con la Alianza del Pacífico, porque ha estado apegada a un “esquema neoliberal” y de libre comercio, el cual ha funcionado en los últimos años.

Si bien dijo que hay un antecedente de extensión de la Presidencia pro tempore, durante la pandemia, subrayó que lo importante es que haya consenso.

“Al Presidente le tienen que hacer entender que una cosa es que tenga una serie de reticencias hacia la señora Dina Boluarte y otra muy distinta que las relaciones diplomáticas, en especial esta relación comercial con Perú, depende de una política de Estado más que de un capricho”, finalizó.