POR MARIO MALDONADO
EL UNIVERSAL
La elección del Estado de México va a ser mucho más cerrada de lo que las encuestas públicas sugieren, según los sondeos confidenciales que encarga el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) –el otrora Cisen–, los cuales son presentados periódicamente al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Los números recabados por una encuestadora, y luego procesados por el CNI cada semana, exponen un empate técnico entre la candidata de Morena, Delfina Gómez, y la de la coalición Va por México, Alejandra del Moral.
Una fuente del gobierno relató una reunión reciente que tuvo el mandatario con el dirigente de Morena, Mario Delgado, para instruir que se redoblen los esfuerzos.
De acuerdo con la medición, a la que tuvo acceso esta columna, al 31 de mayo la candidata del PRI-PAN-PRD y Nueva Alianza, Alejandra del Moral, tiene una intención de voto de 37.2% frente al 45% de la morenista Delfina Gómez, el cual mantiene desde principios de mayo. Si bien la diferencia es de hasta 8 puntos, en el análisis se especifica que el margen de error es de +/- 4%.
Según la encuesta procesada por el CNI, la diferencia real entre las candidatas se acortó a 4 puntos, es decir unos 300 mil votos que ponen la moneda en el aire dependiendo del nivel de participación ciudadana que haya el próximo domingo.
Asimismo, se registró hasta un 16% de indecisos en el estudio, lo que representaría aproximadamente a un millón de personas que, de salir a votar, definirían el resultado de la elección, según la información que recibe el Presidente con la seguridad de que “el nivel de confianza de este ejercicio es de alrededor del 95%”.
De acuerdo con fuentes del CNI, el análisis es el número 15 de los realizados a petición del Ejecutivo federal, los cuales no se socializan siquiera entre la cúpula de la 4T y los datos se interpretan únicamente por los funcionarios del centro de inteligencia para la toma de decisiones en Palacio Nacional.
Las estimaciones de los estrategas políticos estiman que la elección en el Estado de México es la más costosa de todas las entidades por su padrón y su composición social. Más allá de los números oficiales, en realidad se terminaban gastando unos mil 500 millones de pesos en la operación de cada candidato.
Si en la reciente reunión a la que fue convocado el dirigente de Morena le pidieron llevar al doble los recursos para garantizar el triunfo de la maestra Delfina, alrededor de unos 3 mil millones de pesos se habrían destinado a tareas de propaganda, mítines y movilización de estructuras durante toda la campaña, y sobre todo para el día de la jornada.
Los números que le llevan al Presidente desde hace varias semanas forzaron la negociación con Movimiento Ciudadano, que si bien decidió no exponer a su candidato, Juan Zepeda, a una votación de menos del 10%, sí fue conminado a echar mano de una estrategia denominada “Ni un voto al PRI” durante el proceso electoral, apoyados por el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, en la difusión de sus contenidos.
A estas medidas tomadas por la 4T se suma la utilización, distribución y presunta venta del padrón de beneficiarios adultos de los programas sociales, en efectivo y en especie, que se hizo para asegurar más de 1 millón de votos este domingo 4 de junio.
Las cifras apuntan a que en un escenario ideal se requerirían de 3.8 millones de votos para ganar holgadamente la contienda, mientras que, en un escenario de riesgo, la candidata que logre hacerse de 3.1 millones de sufragios podría hacerse de la victoria y esperar una muy posible impugnación de su opositora.
Posdata 1
Una de las encuestadoras consideradas “pro 4T” entregó la semana pasada sus últimos sondeos con los datos reales al operador de campaña de Delfina Gómez, Horacio Duarte. La reacción del texcocano fue tal ante las tendencias tan cerradas que decidió echar del proceso a dicha empresa, a la que ya habían apalabrado para que estuviera en las encuestas de salida el día de la elección.
Se asegura que la mano del fundador del Grupo Texcoco, Higinio Martínez, el día de la elección va a ser determinante para inclinar la balanza hacia un lado o hacia el otro.
Posdata 2
Como lo adelantamos ayer por la mañana en Twitter, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador finalmente llegó a un acuerdo con Grupo México, del empresario Germán Larrea, para recibir una compensación por la toma de la concesión de 120 kilómetros de vías en Veracruz de la empresa Ferrosur.
El Presidente lo confirmó por la tarde, de gira en Tampico, Tamaulipas, y dijo que lo consideraba un “buen acuerdo”, aunque faltaba una firma.
Según la información a la que tuvo acceso este columnista, el acuerdo no es indemnizar con dinero a Grupo México, sino la extensión del tiempo de algunas concesiones ferroviarias y una disminución de las contraprestaciones.
Hoy deberían anunciarse los términos del acuerdo.