EU, Rusia y China estarían ampliando instalaciones para pruebas nucleares: medios

Las tensiones globales han alcanzado niveles inéditos en décadas mientras Rusia, Estados Unidos y China realizan expansiones significativas en sus instalaciones de pruebas nucleares, según imágenes de satélite obtenidas por la cadena CNN. Aunque no existen pruebas de preparativos inminentes para pruebas nucleares, estas expansiones en tres sitios clave han encendido las alarmas en la comunidad internacional.

Imágenes satelitales, recopiladas a lo largo de los últimos tres a cinco años, revelan un crecimiento en instalaciones, excavación de nuevos túneles y un aumento en el tráfico vehicular en los sitios de pruebas nucleares en China, Rusia y Estados Unidos. Esto ha desatado preocupaciones sobre la posibilidad de que estas potencias estén considerando reanudar este tipo de ejercicios, algo que no ha sucedido desde que se prohibieron las pruebas subterráneas en 1996 bajo el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBT).

Jeffrey Lewis, profesor adjunto del Centro James Martin para Estudios de No Proliferación en el Instituto Middlebury de Estudios Internacionales, destacó que «estamos viendo muchos indicios que sugieren que Rusia, China y Estados Unidos podrían reanudar las pruebas nucleares». Esto ha generado preocupación en medio de una profunda desconfianza entre estas naciones.

La retórica belicosa ha acompañado estas expansiones, con el presidente ruso, Vladimir Putin, declarando en febrero su disposición a ordenar una prueba nuclear si Estados Unidos lo hacía primero. Además, la construcción de nuevas instalaciones y túneles subterráneos ha llevado a analistas a concluir que estas naciones podrían estar preparándose para una posible reanudación de pruebas nucleares.

El Reloj del Apocalipsis, una medida simbólica que evalúa cuán cerca está el mundo de un desastre global, fue ajustado en 2023 a 90 segundos para la medianoche por el Boletín de Científicos Atómicos, citando la guerra en Ucrania como factor clave. La amenaza de pruebas nucleares, aunque no inminentes, contribuye a una carrera armamentista que consume recursos sin aumentar la seguridad.

El coronel retirado de la Fuerza Aérea estadunidense Cedric Leighton también observó las expansiones en los sitios nucleares de las tres potencias y señaló que «los tres países, Rusia, China y Estados Unidos, han invertido una gran cantidad de tiempo, esfuerzo y dinero en preparar los tipos de actividades que serían necesarias para una prueba».

Las imágenes satelitales revelan una creciente actividad en el sitio de pruebas nucleares ruso en Novaya Zemlya, en el Ártico, donde se han construido nuevos túneles y carreteras. Además, los datos apuntan a un aumento en la actividad en el sitio de pruebas nucleares chino en Lop Nur, incluyendo un nuevo túnel subterráneo y la construcción de instalaciones de almacenamiento.

Estados Unidos, aunque ha realizado su última prueba subterránea en 1992, ha mantenido una preparación constante para realizar pruebas nucleares en respuesta a acciones de otras naciones. Imágenes satelitales comerciales indican una expansión del complejo U1a en el Sitio de Seguridad Nacional de Nevada, destinado a experimentos nucleares «subcríticos» para garantizar la confiabilidad de las armas en el arsenal sin pruebas a gran escala.

Estas expansiones y preparativos han alimentado la preocupación de que las naciones puedan estar considerando pruebas nucleares, desencadenando una escalada de tensiones en un mundo ya tenso y desconfiado. Aunque el peligro de pruebas nucleares sigue siendo un riesgo real, la comunidad internacional busca evitar el resurgimiento de estas pruebas destructivas.