CIUDAD DE MÉXICO.- El enfrentamiento entre los candidatos presidenciales del PAN, Ricardo Anaya, y del PRI, José Antonio Meade, es un pleito al interior de la mafia del poder donde “hay corrupción, manipulación y circo” con el único interés de ganar adeptos entre el electorado, pero que puede resultar muy peligroso para el país, sentenció ayer Andrés Manuel López Obrador.
En entrevista desde Tijuana, Baja California, el abanderado presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia reprobó el nivel de amago que ha tomado la confrontación entre Ricardo Anaya y José Antonio Meade, pues mientras desde los Estados Unidos “prácticamente se ha declarado una guerra comercial en contra de México”, por un posible aumento a los aranceles al acero y aluminio, “el PRIAN” intensifica la violencia política a la que está acostumbrado con amenazas de “encarcelamiento al jefe del Ejecutivo”, sin importarle que la violencia criminal ya es bastante en el territorio nacional.
Por ese motivo, López Obrador dijo estar en posición de exigirle a sus oponentes políticos que “actúen con urbanidad, de manera responsable y sin hacerle daño al país”.
“Es corrupción, manipulación y circo, todo esto de que se van a meter a la cárcel es muy frecuente en la mafia del poder, acuérdense que (Carlos) Salinas utilizó esa estrategia de actuar de manera espectacular, metiendo a la cárcel a La Quina… a mí no me van a engañar, son iguales” precisó.
Según López Obrador, la discordia no hace bien al país y lo que su movimiento busca no es ni la venganza ni la persecución, por ello demandó al PRI y al PAN que no sean tan violentos y mejor expliquen cuál fue el motivo de ruptura entre ambos.
“Es el PRIAN, que no nos engañen, ahora tienen sus diferencias, se están peleando, pero son lo mismo. Tenemos el derecho de decirles: cuiden la estabilidad política, cuiden la paz social, no desaten al tigre, no pueden actuar de manera irresponsable”, destacó.
Antes de concluir el encuentro con medios de comunicación, el candidato presidencial solicitó a Ricardo Anaya revelar el número de veces que se reunió en lo oscurito” con el presidente Enrique Peña.
“Que no salga ahora como si no conociera a Peña, se sacude, se quiere lavar las manos y aparece como el paladín de las libertades y de la limpieza, como el ‘maestro limpio’, que me diga primero cuántas veces ha visto a Peña y qué fue lo que llevó a la ruptura”.
En medio de este enfrentamiento, el candidato de Morena descartó que después de la “guerra sucia” contra el aspirante panista, los ataques se enfoquen hacia su persona, pues estimó que desde años ha padecido al PRI y al PAN.
No obstante, dijo que es preocupante el tono de confrontación que ha surgido en el PRI y en el PAN porque el país “no está para bollos”, ya que la violencia política puede generar inestabilidad, fuga de capitales o crisis financiera”.