- Salarios que se perciben actualmente, son un insulto para el trabajador; se requiere que al menos se pague $200.00 diarios: Adrián Mendoza.
Irineo Pérez Melo u La desaparición se la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), como lo plantea el sector patronal, podría ser un “arma de doble filo” que golpearía fuertemente a la clase obrera, aseguró Adrián Mendoza López, secretario de Actas del Comité Ejecutivo Nacional de la Confederación Obrera Revolucionaria (COR) y secretario general de esta central obrera en el estado de Baja California Sur.
En entrevista, durante su estadía en esta capital, para encabezar en representación del CEN de la COR un evento político sindical, mencionó que al desaparecer este organismo, no habría ninguno que regularía los salarios, sobre todo los mínimos, y esto repercutiría en que el trabajador no tendría poder de compra y se generaría mayor inflación.
Con la propuesta de desaparecer la Conasami, resaltó, el sector patronal busca su propio beneficio y mantener salarios bajos y obtener mayores utilidades a costa del sacrificio de los trabajadores.
“Nosotros hemos peleado que los salarios sean más altos, porque los que actualmente se perciben son un insulto para la clase trabajadora”, subrayó.
Dijo estar consciente de que los montos salariales “no se pueden disparar, por lo que se debe analizar la existencia de un equilibrio para que la economía no resulte perjudicaba y sea un pretexto para que los empresarios incrementen los precios de la canasta básica, y no sea pretexto para que no sigan invirtiendo en el país y en este estado, porque es importante que haya inversiones para que siga habiendo más empleo”.
Insistió en la necesidad de contar con un salario bien redituado, superior al que se paga actualmente, el cual podría ser de 200 pesos “para que una familia de 5 miembros pueda vivir y poder satisfacer sus necesidades más ingentes, dado que en la actualidad con lo que ganan no les alcanza y tienen que trabajar todos los miembros de la misma para poder sobrevivir, con las consecuencias sociales que ello trae consigo”, puntualizó.
Insistió en la necesidad de incrementar el salario mínimo, pero sin afectar las inversiones del sector empresarial, mucho menos el poder adquisitivo de los trabajadores, porque las condiciones económicas del país, a pesar de las dificultades que se viven, son propicias para mejorar los salarios a la clase obrera.
Sin embargo, dijo que la iniciativa privada piensa solo en ellos, en las ganancias de ellos y están creando una cultura de que hay que trabajar nada más para los empresarios, al grado tal que estamos llegando a una situación de esclavitud, en donde nos quieren tener nada más trabajando y el empresarios ganando.
Finalmente, reiteró que la situación económica es propicia para que se den incrementos salariales, porque están fluyendo las inversiones extranjeras en México y no veo por qué no haya mejorías salariales.