David Varona Fuentes
Miércoles 11 de julio del 2018.
En algunos meses el gobernador Miguel Ángel Yunes, entregará la estafeta del gobierno del estado, al nuevo mandatario Cuitláhuac García.
Estos meses que faltan para terminar su mandato serán los más largos de su vida. El turco político vanidoso y belicoso, se asoma a la ventana de la soledad de la que difícilmente podrá superar ante un panorama incierto.
Ante una triste realidad: Yunes Linares no tiene amigos, solo dueño de una fortuna incalculable de la que podrá disfrutar a manos llenas.
Pero algo le faltará; el poder político que lo llevó a sentirse dueño del día de la noche.
Y ante inminente entrega del mando, el gobernador lleva a cabo ciertos ajustes en el Poder Judicial, con el apresurado nombramiento de doce nuevos magistrados y con el nombramiento del Fiscal Anticorrupción.
Ante este intento del gobernador, Morena ha puesto el grito al cielo recomendándole a Yunes que dichos nombramientos deben ser avalados por la nueva Cámara; donde el nuevo gobernador deberá colocar a los nuevos impartidores de justicia.
Grandes deben ser las preocupaciones del choleño.
El caso de Javier Duarte y Karime Macías, no lo dejan conciliar el sueño, así como los duartistas que se encuentran presos en el penal de Pacho Viejo, pues en lo que falta de su mandato espera que ya haya sentencia penal para Arturo Bermúdez Zurita a quien están acelerando desde la Fiscalía el delito de lesa humanidad.
Al parecer el fiscal Jorge Winckler, solicitará al juez de turno la sentencia más elevada: 90 años de prisión. Mala noticia para el ex secretario de seguridad, quien con un grupo de abogados ha llevado a cabo una defensa débil y pírrica.
Mientras los otros duartistas presos elevan plegarias al cielo, para que con el nuevo gobernador su suerte pudiera darle un soplo de posible libertad.
Así como las 500 órdenes de aprehensión que están pendientes, de estas ya deben estar en subasta.
Sobre todo cuando Cuitláhuac tiene en la mira al fiscal Winckler al llevarlo a juicio político.
Caso especial, el del diputado Sergio Hernández alias el bailador, quien con complicidad con Carlos Chico Fuentes, tendrán que responder por el fuerte desfalco del presupuesto del Congreso Local, que no es un plato de enchiladas se habla de más de 400 millones de pesos.
Sergio fue uno de los que traiciono al candidato fallido Miguel Ángel Yunes Márquez, pues con recursos que recibió a cambio de miles de votos, no movió ni un dedo y sus famosas casas de enlace, solo le sirvieron para sus intereses personales.
Lo que en los días por venir, la transición se contempla ríspida, pues el gobernador electo ha pintado su raya y hace anuncios nada agradables para Yunes Linares.
Ha trascendido que el propio mandatario ha llamado a cuentas a ciertos secretarios del gabinete; a quienes se les entregaron recursos para que se aplicaran en la compra del voto y que en forma hábil no invirtieron, quedándose con cantidades millonarias.
Los nombres de Irán Arturo Suárez Villa, Enrique Pérez Rodríguez, Francisco Monfort, Manuel Muñoz Ganem y Rogelio Franco Castán, están en la balanza del gobernador del estado.
Muchas broncas y deslealtades se vislumbran alrededor del mandatario veracruzano; quien en la orfandad política no sabe para dónde ir, pues está rodeado de ingratos y traidores.
Hoy se reúne en la Ciudad de México, el gobernador electo Cuitláhuac Hernández con el presidente electo AMLO, ahí estarán también los gobernadores de Morena que triunfaron en el pasado primero de julio.
Información es Poder.
¿O usted qué opina?