Alejandro Moreno podrá reelegirse en la dirigencia del PRI y permanecer hasta 2032 tras el aval a nuevos estatutos en asamblea nacional

LATINUS

La 24 Asamblea Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) aprobó los nuevos estatutos del partido que, entre otros cambios, permiten la reelección del actual presidente nacional Alejandro Moreno.

En esta reunión, que fue a puerta cerrada y transmitida por redes sociales, no hubo debate sobre el cambio a los estatutos y la aprobación en conjunto de todas las modificaciones se hicieron con votación a mano alzada, bajo la justificación de que ya habían sido analizadas en comités estatales y locales.

En voz del diputado Pablo Angulo Briceño, se mencionaron los estatutos del partido que se modifican, entre los que destaca el artículo 178, con el cual se permite que el presidente y secretario general, así como los directivos de las entidades federativas, se reelijan.

En el “Dictamen definitivo de la comisión nacional del dictamen”, entregado a los 3 mil 200 delegados del país, se informa que estos dirigentes podrán durar en su función hasta por cuatro años y “podrán ser electas hasta por tres periodos consecutivos”.

Explica la propuesta de modificación que “los comités municipales y de las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México durarán en su función tres años, y podrán ser electos hasta por dos periodos consecutivos”.

El presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, agradeció los cambios, se pronunció por defender al partido y convocó a los militantes a trabajar por el PRI, México y el nuevo siglo.

“Hoy lo decimos definidos en la socialdemocracia, somos un partido nacional popular democrático y progresista, en consonancia con los retos del nuevo siglo”, dijo.

El dirigente también rechazó las críticas de los priistas que se oponen a su reelección. “Allá afuera estos que se dicen que participan en el PRI son una bola de cínicos, de lacayos, esquiroles al servicio del gobierno y de sus intereses, que quieren romper la unidad a cambio de impunidad”, advirtió.

Los acusó de ser el “peor lastre para nuestro partido” porque “ellos estuvieron al frente cuando castigaron al PRI con el Pemexgate, hay militantes del PRI vinculados al asesinato de nuestro candidato presidencial, eso le costó al PRI”, arengó.

Y cerró con la advertencia de que “no vamos a tapar a nadie, vamos a exigir cuentas, transparencia, y los vamos a convocar a que cumplan con su responsabilidad”.

El dirigente priista cerró su discurso asegurando que no aprobarán la reforma judicial que impulsa el presidente de la República, no obstante, reconoció estar abierto al diálogo con el próximo gobierno presidencial de Claudia Sheinbaum.

“Esperamos que el próximo gobierno, que iniciará a partir del primero de octubre, tenga la responsabilidad y el compromiso de convocar a la reconciliación nacional, a la unidad”, dijo.