La más reciente actualización de Conagua revela que dos embalses ya están vacías; 19 más apenas acumulan 20% de su almacenamiento; expertos ven afectaciones para estados del norte; en NL, otras dos presas están a menos de un mes de secarse; lluvias llegarán hasta mayo
LA RAZON
Apenas inicia la temporada de mayor calor en el país y al menos 56 presas de 18 entidades ya se encuentran con menos del 50 por ciento de su capacidad máxima.
De acuerdo con datos el Sistema Nacional de Información del Agua y el Monitoreo de las Principales Presas de México de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), de las 56 presas, 19 apenas llegan a 20 por ciento y en dos, de plano, tienen cero por ciento de su almacenaje total.
En algunos estados del norte, como Nuevo León, donde hay tres presas con baja capacidad, ya prendieron las alertas por los bajos niveles, y las autoridades señalan que la presa Cerro Prieto, que está en ocho por ciento, tendrá agua para 27 días, mientras que La Boca, con 16 por ciento, está a menos de diez días de que quede seca, y la temporada de lluvias, según Conagua, iniciará hasta mediados de mayo.
Las presas que se encuentran en cero por ciento de su capacidad son Copándaro en Michoacán, y Hermosillo, en Sonora; mientras que las que se encuentran por debajo de 20 por ciento son Ensenada y Abelardo Rodríguez ,en Baja California; Don Martín y La Amistad, en Coahuila; San Bernabé, en el Estado de México; Cerro Prieto y La Boca, en Nuevo León; El Peaje, en San Luis Potosí; Huites, Humaya y Guamuchil en Sinaloa; Punta de Agua Mocuzari, Santa Teresa y El Molinito, en Sonora; así como Falcón y La Blancas, en Tamaulipas. Además, otras 37 están entre 20 y 50 por ciento de su almacenaje.
Claro que se prenden todas las alertas rojas y es un panorama de lo que se nos viene más adelante por la falta de lluvias. Eso ya se está viendo reflejado en los estados del norte, que son los primeros en sufrir las consecuencias de la falta de recurso en sus presas
Al respecto, Jorge Fuentes, director de proyectos del Consejo Consultivo del Agua, aseguró que este año el país sufrirá las consecuencias de la sequía, porque desde finales del pasado e inicios de este, afectó el fenómeno de La Niña, lo que disminuyó las lluvias y por ello, las presas en territorio nacional no llegaron a su nivel óptimo, lo que ya genera problemas en algunos estados.
“Claro que se prenden todas las alertas rojas y es un panorama de lo que se nos viene más adelante por la falta de lluvias. Eso ya se está viendo reflejado en los estados del norte, que son los primeros en sufrir las consecuencias de la falta de recurso en sus presas, pero por ejemplo, en otras entidades, como la Ciudad de México, hay niveles bajos, y esto impacta por la cantidad de población que hay”, explicó.
Las consecuencias de la falta del recurso es el acceso aún más limitado de las comunidades vulnerables, además de posibles enfermedades gastrointestinales por la ausencia o disminución de la higiene.
“Cuando se raciona el agua se rompe la dinámica, porque aparte tienes que gastar en comprar agua embotellada o de garrafón para usos básicos, lo que genera un impacto en los bolsillos también. Lo que seguramente se va a hacer es administrar el agua para que llegue menos, ya que los ciudadanos a veces no tenemos una cultura de ahorro de agua», aclaró.
Además, comentó que otro de los problemas es la falta de infraestructura para captación de agua de lluvia, ya que esa agua bien almacenada puede ayudar en épocas de sequía, pero no para consumo sino para riesgo o lavado de ropa, aparte de que México tiene el grave problema de que no trata sus aguas residuales.
Lo que hacen en la agricultura es que toman el agua de los pozos, que es pura ,y sirve para beber, para regar sus cultivos, y eso no se debe hacer; se deben ocupar las plantas de tratamiento que se encuentran olvidadas en el país
José Luis Luege, Exdirector de Conagua