Delfino Hernández Jiménez
POR “CANALLA” LO ESTA PAGANDO; OBSESION QUE NO RESULTARA
Que difícil se está tornando el cierre de la elección en el país, incluida la gubernatura de Veracruz.
El tercer debate de amenazas sin consistencias se dio por parte de un candidato panista; un candidato priista con más mesura y uno de Morena, que honradamente hizo el ridículo al hablar de la reforma educativa entre otros temas.
Pero en eso de los escándalos, en el PAN, creo que se han vuelto más recurrentes. Desde el inicio de este arguende, Ricardo Anaya, se dedicó a lo que todos ya sabemos en lograr una candidatura sin importar los agravios en contra de los auténticos panistas, como Margarita Zavala, quien se había convertido en la aspirante que podía vencer el populismo de López Obrador.
En el marzo del 2017, según una medición nacional de El Financiero, Margarita Zavala, superaba en 4 puntos a López Obrador, mientras en la contienda interna del PAN, Zavala mantenía 39 por ciento sobre un 25 por ciento de Anaya.
También es cierto que esta misma empresa de comunicación, meses después, en junio, publicaba que Andrés Manuel López Obrador, superaba ya a la esposa de Calderón por solo dos puntos porcentuales. Hablaban de un 30 por ciento para AMLO y un 28 para Zavala.
Si nos vamos un poco más atrás, hace 20 meses, Margarita Zavala, le sacaba 5 puntos de ventaja a Obrador, de acuerdo con una medición realizada por El Universal, en un parámetro de 30 puntos sobre 25 de Obrador, solo que desde ese entonces ya se consignaba la ambición desmedida de Ricardo Anaya, quien antepuso el interés de nación-partidista, por el suyo, lo que acarreo el odio de un grupo severo del mismos instituto político, que hoy lo tiene con un pie en el cuello y en la cárcel de no ganar la elección.
De que se queja entonces Ricardo Anaya. De qué culpa a Peña nieto públicamente y amenaza que lo va a meter a la cárcel y no ha dicho el delito. Anaya, sabe que cavó su propia tumba política desde que traicionó a los que lo ayudaron a llegar a la presidencia nacional del PAN. Él sabe que las facturas se las van a cobrar y para que la cuña apriete tiene que ser del mismo palo, sabe que por los panistas perderá la elección…Lastima que llegó solo a dividir al electorado.
VERACRUZ CASO SIMILAR.
En un Veracruz se presenta un panorama político con muchas similitudes al de Anaya, solo que aquí un gobernador priista colaboró para que el PAN obtuviera un triunfo de dos años con un candidato que prometió y simplemente no cumplió.
Pero la similitud al igual que Anaya inicia en el PAN. También en Veracruz, los auténticos panistas están realmente molestos porque un priista que vino de perder cien alcaldías como presidente de su partido, se apoderó del PAN y les ha cerrado los principales espacios beneficiándose solo la familia y un solo núcleo reducido de amigos cercanos.
Ahora el gobernador Miguel Ángel Yunes, obsesionado por el poder es el primero en poner el desorden y la veda electoral parece no importarle, él anda en plena campaña.
La tarde de este miércoles estuvo en Yanga, para definir acciones de gobierno y anuncio ante los medios obra pública a iniciar en breve, lo que contraviene un proceso democrático.
Aunque para ser realista, es el mismo gobernador Yunes Linares, quien se ha convertido en el principal enemigo de su hijo, que pese a la promoción de la monarquía, sigue evidenciándose como un pésimo gobierno y el resultado el día de la elección será negativo…El gober pagará con la derrota las consecuencias de sus actos.
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