*La mayoría no tiene propuestas, desconociendo totalmente el trabajo de un diputado federal o local
POR JAVIER VARGAS SALINAS
FORTIN.- Unas elecciones atípicas y grises son las que están por concluir, las cuales estuvieron marcadas por las descalificaciones, los escándalos de corrupción y una guerra sucia por parte del gobierno federal para los candidatos a la presidencia de la república, lo cual fue un pésimo mensaje para las otras candidaturas que en Veracruz son gubernatura, senadurías, diputados federales y locales.
Así lo dio a conocer el dirigente de los tianguistas Siglo XXI, Raymundo Díaz Mota, puso por ejemplo en el distrito de Córdoba, donde con la diputación local se esperaba las campañas en su totalidad se viera un total involucramiento de la sociedad pero tristemente fue lo contrario, son escasos en algunos distritos donde los candidatos realizaron buenas campañas, llevando propuestas reales y confiables.
Estas campañas contrastan con la pobreza que viven muchas familias de esta región, ya que se tiene una miseria de propuestas donde no se ve la plataforma política de los partidos ni de los candidatos, parece que no quisieran tener un contacto directo con la gente, en las redes sociales también se vieron muy bajas las campañas.
Raymundo Díaz señalo que en algunos casos, los candidatos jamás han sido políticos, y para muchos, fue una aventura, se está acabando la mentalidad empresarial donde un candidato tiene que invertir para ganar, dejando ver una aversión contra el electorado, acabándose por completo las campañas donde llegaban con el montón de publicidad gorras, playeras, ahora es todo lo contrario, para muchos el no escuchar reclamos es mejor.
Las campañas siempre habían sido un motor para dejar una derrama económica, ya que al haber circulante existía la contratación de diversos servicios, como la serigrafía, imprentas, agencias de publicidad, talleres de bordados, lo que hacía un efecto multiplicador económico, ahora a unos días que concluyan las campañas, solo queda tristeza dentro del electorado, lo que puede traer un total abstencionismo por la apatía que existe dentro de la ciudadanía hacia los políticos.