Uno de los pocos políticos externos capaces de influir en Rusia, Wang Yi, anunció que China lanzaría su iniciativa en el aniversario de la guerra
EL UNIVERSAL
En la Conferencia de Seguridad de Múnich, el alto diplomático chino Wang Yi, uno de los pocos políticos externos capaces de influir en Rusia, anunció que su país lanzaría su iniciativa de paz en el aniversario de la guerra y ya ha estado consultando a Alemania, Italia y Francia sobre sus propuestas.
Declaró que el plan de paz subrayaría la necesidad de defender los principios de soberanía, integridad territorial y la Carta de la ONU, pero al mismo tiempo remarcó que se deben respetar los intereses legítimos de seguridad de Rusia, reportó el medio The Guardian.
Annalena Baerbock, la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, dio la bienvenida a la medida de China y dijo: “Como miembro permanente del consejo de seguridad de la ONU, China tiene la obligación de usar su influencia para asegurar la paz mundial”.
Recordó que había hablado intensamente con Wang el viernes sobre “lo que significa una paz justa: no recompensas al agresor, sino que defiendes el derecho internacional y a aquellos que han sido atacados”. El mismo mensaje ha sido entregado a China por diplomáticos franceses e italianos.
Sin una retirada completa de todas las tropas rusas de Ucrania, no hay posibilidad de que termine la guerra, afirmó Baerbock. “Aunque sea difícil”, todas las demandas de poner fin a la guerra cediendo territorio a Rusia son inaceptables.
“Eso significaría que hacemos que la gente sea presa de Rusia. No haremos eso”.
China sabe que hay una audiencia lista si hace un llamado al diálogo y la paz.
EU advierte sobre las «consecuencias» de dar ayuda a Rusia
El secretario de Estado, Antony Blinken, advirtió sobre las «consecuencias» de dar ayuda a Rusia en la guerra de Ucrania.
En la Conferencia de Seguridad, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, acusó a Rusia de haber cometido en Ucrania «crímenes contra la humanidad».
Según Harris, las fuerzas rusas llevaron a cabo un «ataque generalizado y sistemático» contra la población de la exrepública soviética.