Las negociaciones no han sido satisfactorias, plazo vence este 28 de febrero y se está preparado para la huelga, de no llegar a acuerdos: Enrique Levet
Irineo Pérez Melo.- La Federación Estatal de Sindicatos y Asociaciones del Personal Académico de la Universidad Veracruzana (Fesapauv), está en desacuerdo con la propuesta económica presentada por de la Casa de Estudios, del 4%, acorde al tope salarial establecido a nivel nacional.
Esto lo informó Enrique Levet Gorozpe, secretario general de esta organización sindical, quien consideró que la Universidad debe hacer un esfuerzo para reconocer el trabajo productivo de académicos, profesores, investigadores, así como de los ejecutantes que hacen una gran labor para la extensión y difusión de la cultura.
En el marco de las negociaciones salariales y contractuales que se tienen entre el Sindicato y las autoridades de la Universidad Veracruzana, el dirigente sindical señaló la necesidad que la UV entienda que el Sindicato “no está pidiendo más allá de los alcances que debería de reconocerse en esta negociación colectiva”.
Destacó que “tenemos que hacer el último esfuerzo para llegar a una asamblea complicada en la que seguramente le exigirán a su Comité Ejecutivo Estatal resultados congruentes a la realidad económica que se está viviendo”.
El también secretario general de la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (Contu), lamentó que las últimas reuniones con las autoridades de la UV no hayan sido satisfactorias, debido al intento de propuesta de incremento salarial que puso en la mesa la Casa de Estudios.
Y es que este 28 de febrero vence el emplazamiento a huelga que hizo el Fesapauv a la Universidad Veracruzana.
El pasado 29 de enero, el Fesapauv definió una estrategia ante la preocupación de que pudiera trabarse la negociación con la UV, previa al inicio de las negociaciones de la revisión salarial que la organización sindical planteó para este año con las autoridades de la Máxima Casa de Estudios.
Al respecto, el dirigente sindical dijo en ese momento que había algunos detalles que generaron una preocupación entre sus integrantes a nivel regional que pudieran «trabar» la negociación.
Ante esa circunstancia, el Comité acordó que debían prepararse a través de roles de guardia y las banderas rojinegras correspondientes, que eventualmente se pudieran necesitar en un desequilibrio del proceso de negociación de la revisión salarial.