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El secretario de Relaciones Exteriores sostuvo una conversación con la titular de Seguridad Interior de EU; Videgaray advirtió que si la Guardia Nacional se tradujera en una militarización dañaría la relación bilateral.
El secretario de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Videgaray Caso, sostuvo una conversación con la Secretaria de Seguridad Interior de los Estados Unidos, Kirstjen Nielsen quien le detalló las tareas de la Guardia Nacional estadounidense que será enviada a la frontera con México.
En un comunicado, Kirstjen Nielsen explicó a la Cancillería los siguientes aspectos sobre la decisión de desplegar a los militares en la frontera.
Indicó que la Guardia Nacional únicamente realizará labores de apoyo al Departamento de Seguridad Interior.
Enfatizó que los elementos de la Guardia Nacional no portarán armas ni realizarán funciones de control migratorio o aduanero.
Dijo que se trata de un despliegue de la Guardia Nacional de características comparables a los que tuvieron lugar en 2006, durante la administración del Presidente George W. Bush, con la Operación Jump Start, y en 2010, durante la administración del Presidente Barack Obama, con la Operación Phalanx.
Subrayó que el gobierno de México expresó al de Estados Unidos que, si el anunciado despliegue de la Guardia Nacional se tradujera en una militarización de la frontera, ello dañaría gravemente la relación bilateral.
En tanto, el canciller Luis Videgaray reiteró la importancia fundamental del respeto a la dignidad y los derechos humanos de los mexicanos en Estados Unidos.
“El gobierno de México mantendrá comunicación permanente con el Departamento de Seguridad Interior, a efecto de dar seguimiento a esta medida y determinará las acciones apropiadas a seguir, velando en todo momento por la soberanía e interés nacionales”, agregó el titular de la SRE.