Oscar Coria Reyes
Iniciaron las administraciones municipales en toda la entidad con una situación en común… ESPERANZA… Esperanza en que hagan las cosas bien y no se dejen envolver en los compromisos políticos y no respondan a solo intereses de partido, sino realmente al clamor de la ciudadanía, que sin dudar aseguro que el principal interés es, sentirnos seguros, que nos regresen la confianza en las instituciones y la confianza en que podremos volver a caminar por nuestras calles sin tener miedo.
Sin embargo, el tema es complicado porque no depende al 100% de ellos.
Aun así, esperamos los ciudadanos que los elegimos se guíen con rectitud y transparencia, con los objetivos firmes y bien definidos en beneficio de cada uno de sus municipios y no de grupos.
Pero ya entrando en tema, hablemos de los municipios de la zona centro… El más importante, Córdoba, donde después de los primeros tres días de trabajo, las señales indican una desorganización total, la cual muchos acusan en el sentido de que la dirección del municipio en su totalidad quieren “recaiga” en Lety López, lo cual es imposible, dada la dimensión del municipio y de los espacios existes, es por eso que tanto la alcalde como su gente cercana deberán de entender que lo primero es organizar el “organigrama” (valga la redundancia) y ya sobre el camino ir definiendo las confianzas para delegar responsabilidades, porque lo más grave para este municipio, es que la alcalde no confié en la gente con la que cuenta, por tenerlos por compromisos políticos, como lo señalan gente muy cercana a ella, que desde campaña, le han hecho mucho ruido y mella en cuanto a su liderazgo.
Sin embargo, considero que en base a la experiencia que tiene Lety López, puede lograr converger a su alrededor un grupo interesante que haga de Córdoba, lo que ella quiere, un lugar que “brille” por su historia, trascendencia e importancia, dejando de lado las grillas estériles al interior por esos pequeños grupos de poder, que solo la ven con un signo de pesos y piensan que no tiene la capacidad.
Mientras eso sucede en Córdoba, en Amatlán de los Reyes, las cosas parecen ir muy bien, donde repite Eduardo Rojas Camacho, quien, con la experiencia de ya haber gobernado, trae ideas precisas y define temas como el agua y el drenaje, haciendo propuestas claras, hacia donde debe de enfocarse los recursos y como aplicarse para beneficio de todos.
Sin lugar a dudas, el ya haber sido alcalde de este municipio le da un gran avance en cómo resolver problemas históricos en el municipio, por lo cual se esperan cosas importantes de él.
En tanto en Fortín de las Flores, Toño Mansur, hereda una administración envuelta en chismes, rumores y mucha desconfianza, donde lo mejor para él, es que no lo vinculan de manera directa con el alcalde saliente y mucha gente lo ve como alguien con futuro y con deseos de hacer algo bueno por esta hermosa ciudad.
Sin embargo, los intereses políticos siempre están presentes y algunos señalan que, de no poner un límite a ciertos allegados, las esperanzas en él podrían venirse abajo. Aun así, la gente lo ve como alguien “nuevo” en la política y espera mucho de su persona.
Llegando más a la montaña, otro con experiencia es Serafín González Saavedra, alcalde de Coscomatepec, por segunda vez, a quien con una votación histórica repite y por lo mismo el compromiso es mayor, ya que su fama logro también que su hermano Hugo González, ganara la diputación local.
Sin embargo, se espera que el hermano no influya en los espacios y decisiones, ya que varios munícipes de la zona, señalan que les ha querido imponer espacios, a cambio de “gestionar” a favor de ellos, lo cual no debería de ser condicionado, sino una obligación.
Aun con esto, la gente de Coscomatepec, está a la espera de que, en esta nueva administración, Serafín, siga trabajando como lo hizo en la anterior y beneficie aun a muchas más familias.
Y en cuanto a los demás municipios, estamos en la radiografía y en breve comentaremos sobre ellos…
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