Los primeros resultados de la investigación arrojaron que un par de paracaidistas expertos intentó, en las alturas, realizar una maniobra para salvar a la joven, pero no resultó.
CIUDAD DE MÉXICO (apro). – El viernes 6 de mayo, Romane Hourcastagnou, de 23 años, saltó desde mil metros de altura, en caída libre, pero su paracaídas nunca abrió, por lo que se abrió una investigación de los hechos, en Estrasburgo, Francia.
El incidente se dio cuando un grupo de 10 personas realizaba una actividad en un aeródromo para realizar una caída libre. Supuestamente todos tenían experiencia previa en este tipo de saltos, informó Rionegro.
De hecho, Hourcastagnou era de las jóvenes con más experiencia en este tipo de deportes en el grupo. Los registros indicaban que había hecho este salto en al menos 100 ocasiones antes de esta tragedia.
Tras los hechos, el resto del equipo que practicaba este deporte fue atendido psicológicamente, pues quedaron conmocionados por la muerte de su compañera, afirmó chvnoticias.cl.
La deportista despegó de la base ubicada al pie de la Rue de la Musau alrededor de las 20:25 horas, junto a 10 personas más, en la aeronave, un Pilatus Porter, desde donde saltaron a la zona de aterrizaje.
La parte de la caída libre transcurrió con normalidad, “pero hubo un problema en la inauguración”, contó Roland Ilyes, el director técnico del centro y responsable de esta actividad, según el medio francés DNA.
La policía está averiguando si el paracaídas fue manipulado antes del salto o si se trató de una desafortunada falla. Tampoco se dijo si la joven traía un segundo paracaídas para esta actividad.
Los primeros resultados de la investigación arrojaron que un par de paracaidistas expertos intentó, en las alturas, realizar una maniobra para salvar a la joven, pero no resultó. Además, las autoridades investigan las grabaciones tomadas con su cámara GoPro.
Los testigos “observaron lo sucedido con gran impotencia, luego de que el paracaídas no se abrió y que el impacto contra el suelo fue muy violento”.
Hourcastagnou era oficial de policía y llevaba un año practicando el paracaidismo en el Centro Regional de la Escuela de Paracaidismo (CERP) de Alsacia.