- El candidato oficial del PAN-PRD-MC quedó rezagado: Américo Zúñiga
Irineo Pérez Melo u La elección a la gubernatura estatal está entre José Francisco Yunes Zorrilla, de la alianza Por un Veracruz mejor y Cuitláhuac García Jiménez, de la coalición Juntos haremos historia, porque el candidato oficial, del Partido Acción Nacional (PAN) quedó rezagado, aseguró Américo Zúñiga Martínez, presidente del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Entrevistado a su arribo al Conversatorio “Respuestas al Problema de las desapariciones en Veracruz”, convocado por Colectivos de familiares de desaparecidos, el dirigente estatal priista expresó que muy pronto, “gracias a la gran fortaleza regional que hemos encontrado, Pepe estará al frente de la intención del voto y este escenario nos da posibilidades reales, certeras y contundentes de ganar la gubernatura del estado de Veracruz”.
Admitió que el abanderado de los partidos PRI y PVEM, vine de un posición electoral muy incómoda, de rezago, “hoy, gracias al crecimiento sostenido de los últimos días podemos decir con toda claridad que la elección del próximo 1 de julio para la gubernatura será entre Pepe Yunes Zorrilla y el candidato de Morena”.
Estos datos duros, dijo, nos deben obligar a redoblar esfuerzos para estar arriba, en la intención del voto. Lo vamos a lograr muy pronto, gracias a la gran fortaleza regional que hemos encontrado, porque cada vez más ciudadanos se están volcando a una alternativa con seriedad, con propuesta, con experiencia y resultados, que es lo que representa Pepe Yunes”.
En ese tenor, destacó que el PRI y sus aliados han encontrado un grave clima de violencia, que no nos da la certeza de que tengamos un proceso tranquilo y en paz.
“Lo que hemos visto en el sur, en el centro, los ataques a nuestros equipos de campaña y promoción, hablan de un gran nerviosismo por el crecimiento de Pepe Yunes”, subrayó.
Finalmente, comentó que a pesar de la desconfianza que generan las autoridades gubernamentales y electorales, “en el PRI confiamos en los miles de ciudadanos que participarán como funcionarios de casillas”.
“Confiamos en la gente buena, en la gente decente, en la gente insaculada y que hará un gran esfuerzo de civilidad, ayudando a que este proceso electoral sea democrático y transparente”, concluyó.