Entre enero y marzo de 2022 se contabilizaron de forma preliminar 255 mil 448 muertes
En México, entre enero y marzo de 2022, se contabilizaron de forma preliminar 255 mil 448 defunciones, lo que representa una disminución de 117 mil 678 (-31.5%) con respecto a las reportadas en el mismo periodo del año inmediato anterior, de acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Pese a lo anterior, el número de decesos sigue siendo 26.1% superior a las 202 mil 558 muertes registradas en los primeros tres meses de 2020 y 27.6% mayor a lo reportado en el primer trimestre de 2019, previo a la crisis sanitaria.
De enero a marzo de 2022, la tasa de defunciones registradas ascendió a 19.9 decesos por cada 10 mil habitantes, 9.4 puntos menor a la reportada durante los primeros tres meses de 2021, pero 3.8 unidades por arriba de las 16.1 muertes reportadas en 2020 y 4.0 puntos mayor a las 15.9 acaecidas en el primer trimestre de 2019.
Tomando en cuenta la dinámica de defunciones registradas en los primeros tres meses de 2022, es probable que los decesos tenderán a recuperar la tendencia que tenían antes de la pandemia hasta 2023, suponiendo que las muertes directas o indirectas por el Covid-19 también se reduzcan.
En el periodo de referencia, 57.1% (145,875) de las defunciones registradas correspondió a hombres, y 42.8 % (109,412), a mujeres. En 161 casos no se especificó.
El porcentaje más alto de las defunciones se presentó en las personas mayores de 64 años. Este ascendió a 62.5% (159,616 casos, dato que considera cinco casos en los que no se especificó el sexo de la persona). El Inegi advierte que en todos los grupos de edad se observa mayor mortalidad entre los hombres.
Las tasas de defunciones más elevadas registradas entre enero y marzo de 2022 por entidad de residencia habitual, son las siguientes: Zacatecas, 25 muertes por cada 100 mil habitantes; Chihuahua, Morelos, Ciudad de México, San Luis Potosí y Sonora, con 22, así como Veracruz y Guanajuato, con 21 en cada caso.
“Los estados con la menor tasa de decesos fueron: Quintana Roo, Guerrero y Sinaloa, con 12 defunciones por cada 100 mil habitantes; Baja California, 15, y Campeche, Aguascalientes, Chiapas, Hidalgo, Nayarit, Tabasco, Nuevo León, Tamaulipas y Tlaxcala, con 16 en cada caso”.
El Inegi explica que la información proviene de los registros de los certificados de defunción captados en el Registro Civil y Servicios Médicos Forenses, y de actas de defunción captadas en las primeras, por lo que aún tienen un carácter preliminar.
Una forma de evaluar la dinámica de las defunciones es lo que se conoce como exceso de mortalidad, es decir, el porcentaje en que se ubican las muertes ocurridas por arriba del número de decesos esperados conforme a la tendencia que venían registrando en los últimos cinco años.
Con relación a la información registrada durante el periodo 2015-2019, de enero de 2020 a marzo de 2022 se esperaban un millón 678 mil 803 defunciones por canales endémicos, que es una forma de deducirlo, y un millón 759 mil 538 defunciones por el modelo cuasi-Poisson, que es otra metodología. Sin embargo, el número de fallecimientos que ocurrieron en el periodo de referencia es de 2 millones 437 mil 629.
Con base en estos resultados es que se tiene un exceso de mortalidad, por todas las causas, de 758 mil 826 con las estimaciones de canales endémicos y de 678 mil 91 mediante el modelo cuasi-Poisson. Lo anterior representa un exceso de 45.20% y 38.54%