Las reformas que el Senado aprobó a la Ley del Banco de México (Banxico) el cual modifica la captación de divisas en dólares, generó la reacción de propios y extraños, lo que hizo que se aplazara su discusión en Diputados, hasta el próximo martes.
En un asunto no inscrito en el orden del día, la propuesta se turnó a la Comisión de Hacienda y Crédito Público, que preside la diputada del Partido Acción Nacional (PAN), Patricia Terrazas Baca; quien señaló que los integrantes de la comisión están analizando la propuesta que puede aprobarse el martes y ese mismo día subir al pleno.
Ayer, el gobernador del banco central, Alejandro Díaz de León, señaló que la reforma los obliga a comprar dólares en efectivo, lo que pone en riesgo la operación y autonomía del organismo.
“Sentimos que si bien pudiera tener una buena intención el querer reforzar el circuito de efectivo, sentimos que es una alternativa muy poco atinada que pone en riesgo al banco central, pone en riesgo el cumplimiento de nuestras funciones y además atenta contra la autonomía del banco central”, sostuvo.
En entrevistas radiofónicas, estimó que la reforma para la captación de divisas no es conveniente ni atiende el problema de los dólares en el país, el cual “se ha sobredimensionado”, pues se ha venido administrando por la banca y han venido “exportando” cerca de cuatro mil 500 millones dólares al año a través de los mecanismos tradicionales.
Tras darse a conocer que el miércoles, el Senado aprobó las modificaciones, el banco central señaló que se podría dar lugar a que autoridades extranjeras impongan restricciones a las entidades financieras de su país y que ofrecen servicios de corresponsalía a las instituciones mexicanas.