Niña se suicida tras ser víctima de bullying, sus atacantes celebran su muerte en redes sociales

Los padres de la menor informaron que el acoso continúa, pues los agresores han dicho que irán a quemar su tumba

HERALDO DE MEXICO

El acoso escolar es una trágica realidad que enfrentan muchos niños, niñas y adolescentes alrededor de todo el mundo, las consecuencias de esta situación son devastadoras, persiguen por años a quienes lo sufrieron, pero en otros casos es tal la desesperación que las víctimas sienten, que optan por terminar con su vida. Un caso así ocurrió en Lille, Francia, cuando una menor decidió suicidarse, pues estaba harta de los golpes, burlas e insultos que recibía de sus compañeros de escuela.

Su nombre era Lindsay, tenía 13 años, y fue el pasado 12 de mayo cuando tomó la dolorosa decisión . Antes de quitarse la vida dejó una desgarradora carta a sus padres, en la misiva no solo se despedía, también les advertía que una de sus compañeras también corría peligro, pues igual que ella era víctima de bullying por sus compañeros de escuela. Estaba preocupada por ella y no quiso irse sin dar aviso de lo que estaba viviendo.

Los padres de Lindsay dieron aviso a las autoridades, quienes comenzaron las investigaciones y procesaron a cuatro menores por acoso escolar con resultado de suicidio, pero debido a su edad están siguiendo su proceso en arresto domiciliario, el cual les permite continuar el acoso contra la niña, pese a que ya murió. Mediante videos han continuado burlándose de la víctima.

De acuerdo con los padres de la menor fallecida, los buleadores -quienes no se esconden e incluso alardean sobre su arresto- han creado perfiles falsos en redes sociales para continuar con el acoso. Los comentarios que han hecho son realmente hirientes, entre ellos incluyen los que dicen que “la zorra” por fin está muerta. Además han dicho que “van a mear o quemar su tumba”. 

Cabe señalar que tres meses antes de que Lindsay se suicidara, se denunció la situación, la niña narró por escrito todos los horrores que vivió a manos de sus compañeros, pero su caso no fue atendido por la policía.

La familia de la joven fallecida ha anunciado que ha presentado una denuncia contra la dirección del colegio, la academia de Lille y los policías a cargo de la investigación por «no ayudar a nadie en peligro». También denunció a Facebook por permitir los mensajes de odio.