El menor de 13 años dijo que dos hombres tocaron a la puerta de su domicilio en la colonia Anáhuac y cuando el militar salió, uno le disparó en la cabeza para luego escapar
EL UNIVERSAL
Ciudad de México.- El militar en retiro que fue asesinado el lunes pasado fue baleado por su hijastro de 13 años, quien dio la alarma por el ataque, pero fue descubierto al analizar las grabaciones de video del sitio donde ocurrió el asesinato.
La mañana del lunes, Rafael «B», sargento en retiro del Ejército Mexicano, fue atacado con un arma de fuego. Un menor de edad, con iniciales OMJR, hijastro de la víctima, dijo que dos hombres tocaron a la puerta de su domicilio en la colonia Anáhuac y cuando el militar salió, uno le disparó en la cabeza para luego escapar.
Sin embargo, cuando los agentes de policía revisaron las cámaras de video del sitio encontraron que a las 6:53 horas Rafael caminaba seguido del menor de edad, quien manipulaba la parte delantera de su pantalón, como si tratara de sacar algún objeto.
Momentos después, se escuchó la detonación y el niño pidió ayuda a gritos, para luego correr hacia su casa y, momentos después, salir nuevamente.
Al revisar las cámaras no se observó el paso de persona alguna, por lo que los policías interrogaron al menor y este confesó que había agredido al militar porque éste lo maltrataba constantemente.
El chico también contó a los agentes que un mecánico a quien conocer como Daniel fue quien le proporcionó el revólver calibre .38 marca Smith & Wesson para atacar a su padrastro; sin embargo, no dio mayores datos de esa persona.