Arturo Reyes Isidoro
Anunció ayer el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares que se ofrece una recompensa “de hasta 5 millones de pesos” por la captura del exFiscal General del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras.
El motivo es porque “ordenó a personal bajo su mando, ocultar y alterar el hallazgo de 13 cuerpos, mismos que fueron localizados en el lugar conocido como La Barranca de La Aurora, en el municipio de Emiliano Zapata, Veracruz, y que es señalado, por testigos, como el lugar en que arrojaban a víctimas de desaparición forzada”.
Conocido como “Fisculín”, el ya prófugo de la justicia veracruzana era un verdadero pájaro de cuenta por ilícitos permitidos o cometidos durante su gestión durante el gobierno de Javier Duarte y sin embargo el 28 de noviembre de 2016 el propio gobierno entrante de Yunes Linares lo dejó escapar prácticamente permitiéndole salir por la puerta grande a cambio de que renunciara al cargo cuando apenas llevaba 34 meses, esto es, dos años y diez meses de un periodo de nueve años para el que había sido designado.
En conferencia de prensa rodeado de sus colaboradores, Bravo Contreras argumentó entonces que se iba porque no sería “factor de división ni encono”, que Veracruz necesitaba en esos momentos unidad y hasta le echó flores al nuevo gobernador (Yunes Linares) diciendo que Veracruz tenía una ruta que le haría transitar “a mejores esquemas de gobernabilidad, de paz social, y de bienestar para sus ciudadanos, de la mano del próximo gobernador del estado”.
Una extensa nota del reportero Ignacio Carvajal publicada en blog.expediente.mx el 01 de diciembre de 2016 registró que con la renuncia Fisculín había recibido “patente de corso” a cambio de una salida “airosa”, “lejos de la posibilidad de ser llamado a cuenta por el primer Congreso plural” (el actual).
“Nacho” Carvajal, un joven reportero especializado en periodismo de investigación, dijo que todo “esbozaba” a “una negociación tejida” con el actual fiscal Jorge Winckler Ortiz a quien Bravo Contreras antes de irse le había dado el nombramiento de primer visitador para que tuviera facultades de quedar al frente de la Fiscalía.
El periodista documentó que la primera en evidenciar irritación fue la diputada local panista María Josefina Gamboa Torales (Maryjose Gamboa), secretaria de la Comisión de Justicia y presidenta de la Comisión de la Verdad, “quien desde el anuncio de la renuncia, se ha expresado en contra de haberle facilitado una salida digna, mientras hay cientos de personas a quienes arruinó la vida”. Ella misma había sido víctima de los excesos del exFiscal quien se había ensañado y la había confinado en prisión por un caso que la justicia le permitía enfrentar en libertad condicional.
“Gamboa Torales escribió en sus redes sociales diversos mensajes que se interpretan como rechazo a la ‘salida airosa’ procurada por Jorge Winckler al cordobés que ha sido señalado directamente por las madres de los colectivos de búsqueda de desaparecidos, de cómplice de omisión de Arturo Bermúdez y de Javier Duarte de Ochoa, quienes ‘diezmaron’ a la población juvenil durante los últimos seis años”.
Carvajal recogió las palabras de Gamboa Torales: “La ‘salida airosa’ de un tipo como el Fiscal me indigna y duele tanto como a ustedes, pero si sola tengo que seguir luchando por la justicia real, así será”.
Qué bueno que se aplique la ley a todo el que la merezca, pero, sin duda, el anuncio de ayer suena a electorero luego de que ya agotaron el tema Javier Duarte porque a la población le hartó que lo utilicen para tratar de captar votos y no pugnan porque lo sentencien, y en una de esas hasta libre queda.
Pero además, el Gobierno del Estado se muestra insensible y desconsiderado ofreciendo 5 millones de pesos por una fichita a la que le dio todas las facilidades para que se fuera impune y en cambio, por ejemplo, ofreció sólo un millón de pesos por la captura del autor material del asesinato de cuatro niños y de sus padres ocurrido el 24 de junio de 2017 en Coatzacoalcos.
Fisculín vive escondido y en una de esas sólo utilizan su nombre para hacer alboroto en pleno proceso electoral (¿por qué no mejor lo buscaron sigilosamente y lo presentaron detenido ante los medios en lugar de anunciar con bombo y platillo que van por él, como enviándole aviso?), (la última vez que supe de él me dijeron que está muy afectado de su sistema nervioso y que acusa problemas de salud mental por el fantasma de una persecución en su contra). Pero aparte del sesgo electorero que parece tener ahora su caso, démosle el beneficio de la duda al Gobierno del Estado y esperemos que aplique la ley, a secas.
Da frutos gestión de diputada
El de Cinthya Lobato Calderón, diputada local, es un caso que ejemplifica lo que debiera ser la actuación de un representante popular, aunque el suyo resulta paradójico en un sistema político que hace de la simulación su distintivo: por trabajar responsablemente se expone a la crítica, que de todos modos no la frena.
No obstante su trabajo por todo el Estado y su buena imagen, en la pasada designación de candidatos a ser reelegidos para el Congreso local la ignoró su partido. Su respuesta fue seguir trabajando de cerca con diversos sectores de la sociedad veracruzana.
¡Pero también por trabajar la critican! Esto pasó el viernes cuando por llegar con retraso a un foro que ella misma ayudó a gestionar para que fueran escuchados y tomados en cuenta Colectivos de personas desaparecidas, malquerientes suya la trataron de desacreditar diciendo que no estuvo cuando sí asistió. Eso ocurrió el viernes.
El sábado estuvo todo el día en el Congreso y me sorprendió que se desocupó hasta las cinco de la tarde luego de atender en el foro y ya fuera de él a representaciones que vinieron de varias partes del Estado, y lo confirmé porque me buscaron para pedirme una gestión ante ella y sólo pude comentarle cuando se desocupó.
Le pregunté sobre las críticas. «Yo no ando en campaña ni busco reelección porque no soy candidata de nada, simplemente estoy cumpliendo con mi trabajo que es escuchar y gestionar lo que los ciudadanos me piden porque son mis jefes y porque para eso me pagan», me respondió.
«Yo sólo pongo mi granito de arena y de este Foro saldrá una nueva Ley, reformas, adiciones a leyes actuales así como políticas públicas para los que vendrán después del 2 de julio».
Se refería al panel que durante viernes y sábado sostuvieron Colectivos de Personas Desaparecidas con especialistas en Justicia y Derechos Humanos, así como con diputados locales, además de la celebración de mesas de trabajo en el Congreso local. Algo significativo es que por primera vez estuvieron juntos todos los Colectivos del Estado.
Me comentó que como resultado se lograron varios puntos de acuerdo que serán plasmados en la nueva Ley de Desaparición Forzada y Cometida por Particulares del Estado de Veracruz.
Recordó que ya habían sido propuestas dos Iniciativas de Ley en el Congreso, una por parte del grupo legislativo del PAN y otra por parte de Morena, pero que en ambas no incluían la voz ni la participación de los Colectivos.
“Se acercaron a mí para que fuera facilitadora y gestionara con mis compañeros diputados locales que integran las comisiones dictaminadoras que los escucharan y que tomaran en cuenta sus propuestas en la elaboración de la nueva ley”.
Afirma que logró el compromiso de cuatro de los seis diputados que integran dichas comisiones –cita al panista Gregorio Murillo Uscanga y a los diputados de Morena, Guadalupe Osorno Maldonado, Rogelio Arturo Rodríguez García y Amado Cruz Malpica− y lamentó que el gran ausente fuera el presidente de la Comisión de Justica, José Luis Enríquez Ambell, pese a que había confirmado su asistencia.
Me dijo que fue advertida de que no se metiera en un “tema escabroso” como tratar con Colectivos, pero que siguió adelante porque no teme a la crítica.
“Decidí tomar el reto porque me buscaron y me pidieron formar parte de esa nueva Ley, ya que son precisamente los Colectivos los que padecen el problema y entiendo perfectamente la angustia y desesperación de las familias que tienen seres queridos ausentes y que llevan hasta diez años luchando por recuperarlos”.
Lo que cuenta, sin duda, son los buenos resultados. Aunque la critiquen, ojalá y siga haciendo para el bien de la colectividad.