Segundo hombre más rico de México llama a sus empleados a votar en contra de AMLO

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Palacio de Hierro, propiedad de Alberto Baillères, se sumó a una lista de empresas que han comenzado a alentar a sus empleados de una forma u otra a pensar cuidadosamente acerca de por quién votarán el 1 de julio.

En México, quizás no existe una experiencia de compra más lujosa que un paseo por una de las 13 tiendas de El Palacio de Hierro. En el local de Perisur, una estructura ondulada de vidrio templado en la zona sur de Ciudad de México, los clientes pueden llevar a casa un bolso Bottega Veneta hecho a mano por 2 mil 400 dólares o un reloj de hombre Bell & Ross con cristal de zafiro de 25 mil 535 dólares.

La cadena es propiedad de Alberto Baillères, el segundo hombre más rico de México. Esta riqueza, de casi 11 mil millones de dólares, según cálculos de Bloomberg, lo puso en la mira de Andrés Manuel López Obrador, el candidato presidencial de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’. Para López Obrador, Baillères forma parte de la “mafia del poder” en México que necesita ser controlada.

Es un mensaje inquietante para los ejecutivos de El Palacio de Hierro,especialmente porque López Obrador tiene una ventaja de 20 puntos sobre su rival más cercano cuando solo falta un mes para las elecciones.

“Los empresarios están muy preocupados, su postura es muy clara”, dijo Alejandro Schtulmann, quien dirige la consultora de riesgo político Empra en Ciudad de México. “López Obrador no ha guardado sus sentimientos, y su discurso genera gran incertidumbre sobre el modelo económico que va a seguir”.

Las conversaciones no tienen necesariamente nada ilegal. Los expertos dicen que, aunque es algo impropio e invasivo, caen en una “zona gris” siempre que no haya coerción real. Y, sin embargo, tampoco hay pruebas claras de que serán eficaces. La táctica incluso podría ser contraproducente.

En un fenómeno similar a cómo los partidarios de Donald Trump parecieron estar más decididos a votar por él en 2016 mientras las figuras públicas más los instaban a reconsiderar su voto, algunos empleados en México dijeron que las charlas les causaban molestia y que no van a ser disuadidos de votar por López Obrador.