- El alcalde Ulises Cuevas argumenta una reestructuración de personal y crisis financiera por laudos que tiene que pagar el ayuntamiento, pero es mentira porque se han contratado a más de 300 empleados: Vannesa González.
Irineo Pérez Melo.- Trabajadores sindicalizados del ayuntamiento de Juchique de Ferrer se manifestaron en la Plaza Sebastián Lerdo de Tejada de esta capital para denunciar al alcalde Ulises Cuevas Hernández de violentar sus derechos laborales al despedir de manera injustificada y arbitraria a 10 de ellos.
Vanessa González Aguirre, secretaria general del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Municipio de Juchique de Ferrer (SUTSEMJ) dio a conocer que el despido se dio “supuestamente por la reestructuración del personal que se dio en el ayuntamiento y por la difícil situación financiera que enfrenta la comuna por los laudos que tiene que pagar”.
Sin embargo, dijo, se tiene conocimiento que se han incorporados a las distintas dependencias municipales unos 300 trabajadores que llegaron con el edil, y que estuvieron trabajando con él en la campaña.
La mayoría de los despedidos son mujeres, entre los que se encuentran quienes integran el comité del sindicato, entre ellas a su dirigente, por lo que ya interpusieron la demanda laboral correspondiente ante el Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje (TECyA), para exigir el pago de una liquidación justa y de los salarios caídos, pues el edil no les cubrió ningún centavo en lo que va de esta administración municipal.
El total de sindicalizados suman 37, de los cuales 10 fueron despedidos, con antigüedades que van de los 10 a los 33 años, siendo despedidos el 18 de febrero pasado, sin mediar justificación alguna.
Recordó que todas las empleadas despedida realizaban labores administrativas en las diferentes dependencias municipales, pero que al iniciar la nueva gestión el Cuevas Hernández las pusieron a realizar actividades que no correspondían a lo establecido en sus condiciones generales de trabajo, esto es que fueron incorporadas a tareas de limpieza de calles y atarjeas, pintura de postes, entre otras.
Las empleadas despedidas se vieron obligadas a iniciar el proceso jurídico ante las instancias laborales correspondientes, para hacer valer sus derechos laborales, ante la cerrazón de las autoridades municipales que no atendieron las dos citas conciliatorias que estipuló el Tribunal para resolver el conflicto.
La demanda fue interpuesta el pasado 4 de marzo, que fue la segunda cita conciliatoria, y que al no tener respuesta, se inició el proceso legal respectivo, y se recorrió a esta instancia ante las agresiones y violencia de género que han sido objeto por parte del alcalde y de la Sindica Eutiquia Martínez Macías, quienes se ufanan de contar con el respaldo del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, al ser militantes de Morena.