Adela fue asesinada a machetazos por su expareja, la acusó de no darle dinero y luego trató de suicidarse

El hombre también hirió a su excuñada, quien trató de defender a su hermana de la agresión

HERALDO DE MEXICO

La violencia feminicida suele estar presente desde el inicio de algunas relaciones, aunque muchos son los factores que hacen que éstas no terminen, pueden durar años, con el peligro latente. En algunos casos, pese a que ya haya una separación, las agresiones continúan. Un caso así ocurrió en el municipio de Chietla, en Puebla, donde una adulta mayor -identificada como Adela– fue asesinada a machetazos por su expareja, José “N”.

 

Fue el pasado 29 de marzo cuando ocurrieron los hechos, pero Adela murió un día después en el hospital, donde también fue su hermana quien resultó herida al tratar de defenderla. Mientras que el presunto feminicida también estaba hospitalizado, pues después del ataque intentó quitarse la vida clavándose el machete en el abdomen, por lo que tuvo que recibir atención médica, permaneció varios días en el nosocomio en calidad de detenido. 

Una vez que los médicos que lo atendieron autorizaron el alta del hospital, quedó a disposición de la autoridad judicial y el pasado 19 de abril un Juez de Control le impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa en una primera audiencia, además fijó un plazo de cuatro anses para la investigación complementaria.

Fue el 27 de abril cuando se le vinculó a proceso por los delitos de feminicidio en agravio de suexpareja Adela, así como por el delito de feminicidio en grado de tentativa en contra de su excuñada y hermana de la víctima, una mujer identificada como Silvia.

Los hechos

Adela ya había contado a su familia que sufría maltratos y violencia doméstica a manos de José, por lo que decidió separarse de él, incluso se mudó a otra casa para estar lejos de él, debido a que la suya estaba junto al actual domicilio del padre de sus hijos.

Pero ese día tuvo que volver a su antigua vivienda, ubicada en Don Roque, municipio de Chietla, cuando José se percató de que estaba allí y fue para reclamarle que supuestamente no repartía de manera equitativa el dinero que sus hijos les enviaban de Estados Unidos. La discusión se tornó violenta y el hombre sacó un machete con el que golpeó a su expareja en la cabeza y abdomen.

Al escuchar los gritos, Silvia llegó a la casa de su hermana y trató de defenderla, pero también recibió un machetazo. Los tres lesionados fueron ingresados al Hospital General de Izúcar de Matamoros para su atención, Adela falleció, el feminicida fue detenido y la otra mujer se recuperó de las heridas sufridas aquel fatidico día.