Una camioneta de valores mató al esposo de Tomasa; 5 días después la empresa no se ha hecho responsable

Ni siquiera se acercaron los representantes de Cometra el día de la sepultura del señor Ramón, denunció la hoy viuda quien también pudo perder la vida

EL UNIVERSAL

TLALNEPANTLA, Méx.- A cinco días de que una camioneta de la empresa de valores Cometra terminó con la vida de Ramón Villegas Corona y destrozó el muro de la frutería donde el comerciante quedó prensado en la colonia El Puerto, “nadie ha venido a hacerse responsables del pago de los daños”, señalaron las víctimas y personas afectadas.

Ni para sepultar a Ramón se acercaron los representantes de la empresa de valores Cometra, señaló Tomasa Leonardo Peña, quien también pudo haber muerto y que quedó viuda cuando la pesada unidad destrozó su puesto y prensó a su marido quien falleció en el lugar.

La mujer de 66 años de edad, con tristeza relató que pudo enterrar a su marido en el municipio mexiquense de San Bartolo Morelos, gracias a la solidaridad de sus sobrinos, luego de que EL UNIVERSAL recorrió las empinadas calles de El Puerto para localizarla.

Cometra tampoco se ha presentado en el local de frutas y verduras ubicada en la esquina de las calles Puerto de Veracruz y Puerto Pacifico, donde “no podemos trabajar y cada día que pasa es un día de pérdidas pues no podemos vender”, señaló Silvia Sánchez.

Cabe recordar que el pasado 12 de abril el conductor de una camioneta de valores de la empresa Cometra perdió el control de la pesada unidad, la cual avanzó en reversa y se inclinó hacia la esquina de la calle Puerto Veracruz, donde se trepó a la banqueta y aplastó el puesto de Ramón y Tomasa, dejando prensado al hombre de 58 años, siniestro que fue captado por cámaras de seguridad.

Antes de morir trató de tranquilizar a su esposa

“No pasa nada, mi hija, estoy bien”, me dijo Ramón para tranquilizarme y soltó mi mano, pero un instante después mi marido murió porque estaba prensado por la camioneta, además perdí mi patrimonio”, al quedar destruido el puesto donde vendían corsetería y cubrebocas, relató Tomasa quien ahora pide justicia.

Cuando Ramón trató de tranquilizarme al oír mis gritos, por el impacto de la camioneta de valores, yo pensé que él igual que yo, había logrado salir por el otro lado de la camioneta, a donde corrí al oír su voz, pero Ramón no salió, quedó prensado y murió después de decirme “No pasa nada mi hija, estoy bien”, pero estaba muriendo, relató consternada Tomasa.